10 formas de prevenir fugas de gás amoníaco y explosiones en frigoríficos

La elección del refrigerante es fundamental en los equipos de refrigeración industrial. Una de las opciones más utilizadas en las grandes instalaciones frigoríficas es el amoniaco, que tiene un alto calor de vaporización y, en consecuencia, garantiza un excelente rendimiento energético. Además, el amoníaco es muy ecológico, con cero potencial de calentamiento global y cero potencial de agotamiento de la capa de ozono.

Sin embargo, la falta de mantenimiento y cuidado en las operaciones de refrigeración puede resultar en fugas de gases refrigerantes, un problema muy común. El gas amoniaco, cuando se libera en ambientes cerrados que impiden su disipación, es muy dañino para la salud y seguridad de los trabajadores, pudiendo incluso provocar explosiones.

Vea 10 formas de prevenir estas fugas y prevenir accidentes aún más grandes.

1. Siga  . Conocida como NR de Refrigeradores, la Norma Reguladora No. 36 – Seguridad y Salud en el Trabajo en las Empresas de Faena y Procesadoras de Carne y Productos Cárnicos – rige las buenas prácticas en estos ambientes laborales, buscando principalmente prevenir y reducir los accidentes laborales.

2. Tener un plan de emergencia determinado. Las empresas deben establecer un plan de emergencia por escrito para aprender a actuar en caso de fuga de amoníaco. Las acciones deben basarse en los estándares regulatorios del sector y deben ser de amplio conocimiento irrestricto del personal de la empresa. Por tanto, contar con un plan previamente conocido evita confusiones y errores que pueden agravar los problemas provocados por una eventual fuga de gas. Un buen plan debe tener pasos como:

  • Informar al departamento de seguridad tan pronto como se detecte una fuga de amoníaco
  • Evacuación del sitio, según la gravedad de la fuga. Es importante que la valoración de si el procedimiento es necesario o no se lleve a cabo rápidamente.
  • Eliminar cualquier fuente de ignición, importante para evitar explosiones que puedan ocurrir por la presencia de la sustancia en el ambiente.
  • Ayude a las víctimas proporcionando primeros auxilios a los afectados por el gas.
  • La Ficha de Información de Seguridad para Productos Químicos (MSDS) es un documento creado para estandarizar los datos sobre las propiedades de los compuestos y mezclas químicos preparado por ABNT. Siempre que sea posible, consulte la MSDS del producto, ya que contiene las medidas a tomar en caso de accidente.

3. Realizar capacitaciones periódicas sobre el plan de emergencia. Más que conocer el texto del plan de acción, los empleados deben recibir una formación práctica y periódica. Es la garantía de que el plan escrito es eficaz y resuelve cualquier emergencia.

4. Asegure una ventilación adecuada para mantener la concentración ambiental del gas en los niveles más bajos posibles. Para ello, los equipos de refrigeración deben instalarse en lugares que eviten la acumulación de gas en caso de fuga.

5. Instale rociadores sobre recipientes grandes de amoníaco para mantenerlos frescos en caso de incendio.

6. Mantener los sistemas de prevención y extinción de incendios en perfecto estado de funcionamiento, así como las salidas de emergencia despejadas y señalizadas.

7. Firmar e identificar correctamente los componentes de la instalación, incluida la tubería.

8. Realizar el mantenimiento periódico de las instalaciones eléctricas cercanas a los tanques. Estos deben estar hechos de material a prueba de explosiones.

9. Utilizar mecanismos de detección temprana de fugas en puntos críticos, acoplados a un sistema de alarma.

10. Instalación de un panel de control del sistema de refrigeración . En caso de fuga, el panel debería activar automáticamente el sistema de alarma y el sistema de control y eliminación de amoniaco.

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